¿Qué tipos de conflictos se pueden solucionar a través de mediación?

Por Silvia G. Palazuelos – Persona Facilitadora Privada Certificada

por el Poder Judicial del Estado de México, No. 104

La mediación es mucho más que una alternativa a los procesos judiciales. Es un espacio seguro, confidencial, colaborativo y legal en el que las personas pueden construir acuerdos desde el diálogo, guiadas por una figura neutral: la persona facilitadora.

Como facilitadora privada certificada, una de las preguntas que más frecuentemente me hacen es:

“¿Qué tipo de conflictos pueden resolverse a través de la mediación?”

La respuesta corta es: muchos más de los que imaginamos.

Aquí te explico algunos de los más comunes y cómo este proceso puede ser útil en cada caso.

Conflictos familiares

• Separación de pareja, bienes, cuidados, régimen de convivencia con niñas, niños y adolescentes, alimentos y custodia.

• Desacuerdos entre hermanos, herencias, decisiones sobre cuidados de personas mayores.

• Mediación intergeneracional (padres- madres-hijos-hijas).

• Padres que no logran acordar un régimen de convivencia o visitas con sus hijos tras una separación.

• Pareja separada en disputa por la elección del colegio o tratamientos médicos de sus descendientes.

• Decisiones sobre el cuidado de una persona mayor o con alguna discapacidad dependiente en la familia.

• Entre otros.

  
  

¿Por qué funciona?

Porque permite a las partes dialogar en forma directa y permite mantener relaciones, sobre todo cuando hay niñas, niños y adolescentes o vínculos afectivos duraderos. El acuerdo lo construyen ellos mismos, y no un tercero.

Incluso si ya hay una demanda presentada, la ley permite a las partes abrir un espacio de diálogo para buscar una solución al conflicto y el convenio que acuerden las partes resultado del proceso de mediación, previa revisión del Centro Estatal de Mediación competente y se registre en el sistema, se considera cosa juzgada.

En cada caso, hay que analizar el conflicto de que se trate por las partes interesadas, con la ayuda de la persona facilitadora, quien les guiará por las diferentes etapas del proceso de mediación, siguiendo una metodología clara, profesional y legal.

Conflictos vecinales o comunitarios

• Ruidos, uso de áreas comunes, mantenimiento, estacionamientos, mascotas.

• Problemas entre grupos o comités vecinales.

• Disputa por árboles que invaden la propiedad vecina.

• Reclamos constantes por fiestas o música a alto volumen.

• Problemas con la administración de un condominio (rendición de cuentas, cuotas, reglas, obras).

• Quejas por el uso exclusivo de áreas comunes por un solo grupo de vecinos.

• Reorganización de espacios o accesos en una privada o fraccionamiento.

¿Por qué funciona?

Favorece el diálogo, la convivencia a largo plazo, previene escalada de conflicto, repara el tejido social y evita confrontaciones legales desgastantes.

Conflictos laborales

• Malentendidos entre empleados por roles, cargas de trabajo o comunicación.

• Ruptura de la confianza entre una jefatura y su equipo por decisiones unilaterales.

• Discrepancias sobre compensaciones, incentivos o cumplimiento de acuerdos laborales.

• Procesos de desvinculación con resentimientos o percepciones de injusticia.

• Dificultades entre socios de una pyme en relación con la dirección o rumbo del negocio.

¿Por qué funciona?

La mediación permite preservar relaciones laborales, encontrar soluciones respetuosas y restaurar un buen clima organizacional.

Además es una excelente práctica organizacional que fomenta a través del diálogo, la solución pacífica de diferencias y conflictos, contribuyendo además a incrementar el bienestar emocional y por ende, productividad de las y los colaboradores de la empresa.

Conflictos civiles y mercantiles

• Incumplimientos de contrato. 

• Arrendatario y propietario que discrepan sobre daños en el inmueble y la devolución del depósito.

• Deudas entre personas o empresas.

• Diferencias entre socios comerciales o proveedores.

• Sucesiones en empresas familiares o entre socios amigos.

• Proveedores que entregaron productos con retraso y la empresa desea negociar una compensación.

• Emprendedores que no definieron claramente sus obligaciones en sociedad y ahora enfrentan disputas.

• Cliente que se niega a pagar un servicio por considerar que fue mal ejecutado.

• Venta de vehículo entre particulares con desacuerdos posteriores sobre el estado del bien.

¿Por qué funciona?

Se enfoca en intereses, necesidades no en culpas. Muchas veces, las relaciones comerciales pueden repararse y seguir adelante tras una buena mediación.

Especialmente prioriza conservar la relación con los clientes o proveedores para continuar el servicio y también para fortalecer la reputación de la empresa, fortaleciendo el mensaje del diálogo y colaboración para la solución de conflictos.

Conflictos escolares

• Problemas entre estudiantes, padres, docentes o personal administrativo.

• Casos de acoso o conflictos disciplinarios.

  
  

¿Por qué funciona?

Se prioriza la escucha, la reparación y el aprendizaje. La mediación fomenta una cultura de paz en el entorno educativo.

¿Qué no se puede mediar?

Aunque la mediación es muy versátil, no todos los casos son mediables. Por ejemplo, no se pueden mediar temas donde hay violencia o riesgo a la seguridad de alguna de las partes, cuando una de las partes no tiene capacidad legal o cuando no existe voluntad de diálogo.

Asimismo, es importante señalar que la mediación, tiene fundamento en la Constitución y en las leyes de la materia, durante el proceso de mediación la persona facilitadora está obligada a cuidar y hacer respetar los principios de la mediación, sus etapas, proteger el interés superior de niñas, niños y adolescentes, la igualdad entre las partes y los derechos humanos, por ende, si alguno de ellos no se cumple o es vulnerado, se actualiza un límite a la mediación.

En resumen

La mediación es una herramienta poderosa y versátil para resolver o prevenir futuros conflictos de forma voluntaria, colaborativa, eficiente, respetuosa y legal. Si estás atravesando una diferencia o quieres prevenir alguna futura, antes de ir a juicio, conoce más, infórmate, investiga, pregunta, acércate a un Centro Público de mediación o a una persona facilitadora privada certificada. Tal vez la solución esté más cerca de lo que imaginas.

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